Las empresas enfrentan diferentes desafíos en la actualidad. La preparación de los colaboradores en aspectos técnicos o habilidades duras, como el manejo contable o el conocimiento del mercado, son de gran importancia para el desarrollo diario. No obstante, cuando un negocio atraviesa una contingencia, las habilidades blandas, es decir aquellas aptitudes que les permiten a las personas desenvolverse con facilidad en su entorno y trabajar bien con otros, son las que permiten lograr una resolución efectiva.